El ciclismo es uno de los deportes más completos que existe, pero tiene la desventaja de que las condiciones ambientales pueden limitar el entrenamiento en exteriores. No obstante, un ciclista debe garantizar subirse a la bici diariamente, para mantenerse en forma.
Para esto, se han desarrollado distintas alternativas, como las bicicletas estáticas o los rodillos de entrenamiento. Estos últimos permiten que utilices tu bici en interiores al mantener las ruedas fijas y puedas pedalear sin inconvenientes.
Según tus requerimientos particulares y lo que buscas como deportista dentro del ciclismo, puede convenirte más usar un tipo de entrenamiento que otro. Conoce lo que te ofrecen las bicicletas estáticas y los rodillos, a fin de que hagas la mejor elección.
¿Cómo es el entrenamiento en una bicicleta estática?
Estas bicicletas fueron desarrolladas para permitir el ejercicio indoor, generalmente en clases colectivas en los gimnasios. Hay de distintos tipos, desde las clásicas estáticas donde pedaleas sentado, hasta las de spinning, que permiten pedaleos tanto sentados como de pie.
Con una bicicleta estática, vas a hacer principalmente ejercicios que te llevan a un mejor desarrollo cardiovascular. Un entrenamiento planificado en este tipo de equipos, es ideal para fortalecer los músculos del abdomen y las piernas.
Por lo general, es una excelente opción cuando quieres tener un pequeño gimnasio en casa o para entrenarte en el gimnasio con otras personas. Entre sus ventajas destacan:
- Están muy recomendadas cuando quieres hacer entrenamiento de fuerza.
- Es posible ajustar la resistencia, de tal manera que vas aumentando el esfuerzo al entrenar.
- Tienen dispositivos que permiten llevar control del tiempo de entrenamiento, velocidad, distancia recorrida, hasta calorías quemadas y pulsaciones cardíacas.
- Suelen contar con soportes para apoyar los dispositivos electrónicos y utilizar tecnologías de realidad virtual.
¿Qué ofrecen los rodillos para entrenar con la bici?
Un ciclista o no puede perder contacto con su bicicleta, debido a que se integra a la máquina en cuanto a la postura que adopta. De esta manera, conoce la respuesta de la misma, su peso y hasta la forma en que debe moverse para obtener el mayor rendimiento.
Como una vía para permitir que puedas entrenar con la bici en todo momento, se desarrollaron los rodillos de entrenamiento. Los mismos son dispositivos especiales para fijar las ruedas de la bicicleta, permitiendo pedalear sin moverse del sitio.
Tal como leemos en el siguiente artículo de MERCA2, hay distintos tipos de rodillos, con funcionalidades ligeramente distintas. Desde los que fijan las ruedas directamente, hasta aquellos que requieren desmontar la rueda trasera, para una fijación más estable.
Hay muchos profesionales que optan por el uso del rodillo para el entrenamiento indoor, debido a que consideran que les ofrece numerosas ventajas, como:
- Excelentes sensaciones de pedaleo, lo que hacen el entrenamiento muy realista.
- Contribuye a ejercitar el equilibrio, además de permitir una postura más natural en la bici.
- Es más sencillo controlar la potencia de pedaleo y la inclinación del cuerpo.
- El ciclista puede trabajar más la concentración, debido a que debe enfocarse en mantener la postura y el equilibrio.
¿Cuál es mejor para entrenar entre la bicicleta estática y el rodillo?
Elegir entre estas dos opciones, va a depender en gran medida de lo que estés buscando al realizar el entrenamiento en interiores. Para aquellos que buscan una actividad física completa, que los ayude a mantenerse en forma, posiblemente la bicicleta estática es lo mejor.
Si eres un ciclista de alta competencia o quieres mejorar tu nivel deportivo, lo más probable es que optes por los rodillos. No obstante, es conveniente que conozcas lo que te ofrece cada equipo, a fin de tomar una mejor decisión:
Manejo de la resistencia
En este caso, las bicicletas estáticas han sido diseñadas para permitir ajustar la resistencia, según las necesidades del usuario. Esto permite que los principiantes empiecen con un esfuerzo muy bajo, y a medida que van ganando fuerza, vayan aumentando la resistencia en el pedaleo.
Por su parte, la mayoría de los rodillos no incluyen ningún tipo de mecanismo que permita manejar la resistencia. Sin embargo, hay modelos inteligentes, capaces de cambiar el tipo de esfuerzo de manera electrónica, siendo ideales para entrenamientos más realistas.
Postura y naturalidad del pedaleo
En este aspecto, no hay duda que los rodillos son los vencedores, debido a que te permiten utilizar la bicicleta que usas de manera regular. Por tanto, tienes la posibilidad de mantener la inclinación que tendrás cuando salgas a carretera.
Asimismo, se mantiene una cadencia y pedaleo muy natural, lo que te brinda una sensación bastante similar a lo que sientes cuando vas en la ruta. En la bicicleta estática, las posturas son más limitadas y el pedaleo nunca será igual al de una bici de carretera.
Facilidad de manejo y almacenamiento
Una bicicleta estática es muy sencilla de montar, sencillamente la instalas y ya está lista para usarse. Por lo general, tiende a ser bastante silenciosa, no necesitas una bici para exteriores y suele contar con distintos soportes para colocar los accesorios para entrenar.
Cuando usas un rodillo, es necesario montar la bicicleta, en muchos casos desmontando la rueda trasera, para que el cuadro encaje en el equipo. Además, algunos rodillos suelen ser ruidosos y los soportes para accesorios, son los que ya trae tu bicicleta.
Conectividad
Este aspecto se ha vuelto importante para aquellos que buscan un entrenamiento más realista, que no se vuelve monótono. En ambos tipos de equipos, encontrarás modelos sencillos sin conectividad, hasta los llamados inteligentes, que permiten usar programas de realidad virtual.
Hay bicis estáticas que incluyen pantallas interactivas, para programar tus entrenamientos y sensores que toman distintas métricas. Por su parte, los rodillos más modernos, se conectan a apps o software de simuladores, que permiten diseñar planes de entrenamiento personalizados.
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